Faltan cinco días para su cumpleaños 90 / Los misterios del no. 11 que utilizó Luis Aparicio como pelotero (Parte VI)

Por Orlando Bohórquez Parra

Prensa/Jabeando/24-04-2024.- Entrando en una onda familiar de Luis Ernesto Aparicio Montiel, el junior, nos encontramos con un hombre de un solo amor de pareja por siempre. Lo que no cristalizó en su Maracaibo querido y en ningún lugar de Venezuela, lo consiguió en Nueva York y con una nativa de Puerto Rico, es decir su amada Sonia Llorente, madre de sus cinco hijos y hasta el Sol de Hoy, iluminando con clara luz su vida.

Sonia, sobrina de un pelotero que hizo historia en las Grandes Ligas, como fue Jim Rivera, apareció un buen día en tierras estadounidenses ante los ojos del futuro miembro del Salón de la Fama del Béisbol Grande. Esto ocurrió un día 11 de ese entonces, cuyo número no llamó la atención en ese momento, pero que luego se hizo histórico, según relata la familia Aparicio Llorente.

Fue casi un amor a primera vista y se unieron en matrimonio en 1956, año en que debutó nuestro héroe con los Medias Blancas de Chicago

Tuvieron cinco hijos, el mayor Luis Ernesto como su padre, Luego llegaron tres hembras, Sonia, como su mamá, Sharon, nombre que escogió su mamá, porque leía una novela donde la protagonista tenía ese bonito nombre. Después nació Karen, y aquí se repitió el gusto de la señora Sonia, que sacó el nombre de otra novela que le gustaba. El quinto y no hay quinto malo, nace Nelson Manuel, a quien su papá le da el primer nombre por Nelson Fox, su compañero de doble plays en el equipo de Chicago y el segundo nombre Manuel, por su abuelo materno y papá de Sonia, un académico puertorriqueño, que se graduó con cinco títulos universitarios, es decir toda una eminencia profesional.

Esta es parte de la interesante y ejemplarizante vida familiar de esta gloria del deporte venezolano y a nivel mundial como es Luis Ernesto Aparicio Montiel, el junior de Maracaibo, parroquia Santa Lucía.

Nota… estos datos son suministrados por el doctor en leyes, hijo de Luis Aparicio, Nelson Aparicio, al profesor José Domingo Romero. Escribe Orlando Bohórquez.