Por Simón Piña
Este sábado 27 de enero, veremos nuevamente, al espectacular Campeón venezolano Jorge Linares, monarca de los pesos Ligeros AMB y Diamante CMB, cuando enfrente en su 3ra defensa al filipino Mercito Gesta en el fabuloso Forum de Inglewood, en Los Ángeles. La pelea, pareciera ser, para Linares, la antesala a su ingreso a la Élite del boxeo donde se encuentran hombres como Micky García, Terence Crawfors, Vasyl Lomachenko, Gennaddy Golovkin, Canelo Álvarez y otros destacados pugilistas.
Linares ha sido Campeón en tres divisiones diferentes: Pluma, Superpluma y Ligero, pero, ya sea porque pocos de sus rivales han sido grandes retadores o porque ha perdido varias peleas por Ko, Linares no ha podido posicionarse definitivamente en el Top Ten de los grandes. A su favor tiene un gran estilo, un boxeo elegantísimo, combinaciones relampagueantes y un singular carisma para el público seguidor del pugilismo. No es que Mercito Gesta represente un gran peligro para Linares ni que un triunfo sobre el filipino pudiera significar una graduación, sino que, luego de sus victorias sobre los ingleses, Kevin Mitchell, Anthony Crolla (dos veces) y el Campeón Olímpico Luke Campbell ya sólo necesita una o dos peleas de preparación para tomar por asalto el Top Ten y las bolsas millonarias.
PERO MERCITO TIENE BUENA CAMPAÑA
Mercito Gesta cuenta con una hoja de servicios muy llamativa al compilar 31 triunfos, 17 de ellos por Nocaut, una derrota, por decisión, disputando el título mundial Ligero de la FIB, al mexicano de Guadalajara, Miguel Vásquez, en aquella célebre cartelera en el MGM Grand del 8 de diciembre de 2012, en la que el mexicano Juan Manuel Marque fulminó a Manny Pacquiao. En su récord, Mercito, presenta también, dos empates. Si bien, este filipino no saldrá favorito, no es menos cierto que ese record es para tomarlo en cuenta.
Este Tapatío, Miguel Vásquez, es un peleador de una campaña muy llamativa, ya que fue un sólido Campeón Ligero de la FIB, el cual defendió exitosamente esta corona, seis veces, perdiendo en la séptima ante el norteamericano Micky Bey. Igualmente, ha enfrentado distinguidos rivales. Su debut, en Guadalajara, fue nada menos, que contra el Canelo Álvarez ante quien perdió por puntos. Un par de años después, volvió a perder con Canelo, a los puntos, en México. Un año antes de esta última pelea, en el 2007, Vásquez fue vencido por otro ilustre de la época, Timothy Bradley Jr.
¿QUÉ LE FALTA A LINARES PARA SER SUPERESTRELLA?,
Hemos observado que Linares, a ratos, tiene desplazamientos, combinaciones de golpes, que recuerdan a algunos grandes del boxeo (guardando las debidas distancias) como De La Hoya, Leonard, Mayweather. De allí su apodo de “Niño de Oro”. Pero también hemos observado que Jorge, en sus peleas, presenta unas desconcertantes pausas, en las cuales, parece distraerse y dejar todo el peso de la pelea, a su rival. Retrocede sin tirar golpes ni mantener su distancia, se pone los guantes en la cara y se recuesta de las cuerdas, dejándole todo el campo a su rival para que conecte con libertad. Si va a recuperar energías, mejor se mantiene a distancia, Jabea oportunamente, se amarra y baja el ritmo de pelea, pero no puede venderse al rival, sin presentar oposición.
Estas Lagunas, son las que, creemos, separan todavía a Linares del grupo de los grandes. Cualquiera de estas treguas, puede provocar, como le ha pasado antes, que su oponente se crezca y lo lastime sin necesidad. Un atacante insistente, como podría ser Mercito, podría ponerlo en problemas. Si Jorge resuelve estas lagunas en su accionar y su ritmo de pelea resultará más coherente, sería casi imposible de derrotar. Ese es el principal chance que podría tener el filipino para sorprender al venezolano. De no ser así, Linares no debería tener problemas en retener su corona. Pero esa inconsistencia la tiene que resolver, no sólo para esta pelea, sino, de por vida o su carrera no experimentará el anhelado ascenso a la Élite de los consagrados.