Por Francisco Pimentel
Prensa/AMB/Jabeando/15-02-2018.- Daniel Román estrenará el campeonato Supergallo de la Asociación Mundial de Boxeo el próximo 28 de febrero ante Ryo Matsumoto en el legendario Korakuen Hall de Tokio, Japón, y consideró que una victoria en el País del Sol Naciente significará el primer escalón hacia su principal objetivo en este punto de su carrera: convertirse en el mejor Supergallo del mundo.
A sólo unos días de abordar el avión que lo devuelva a Japón, donde conquistó el campeonato tras destronar al nipón Shun Kubo en septiembre pasado, confesó Román (23-2-1, 9 nocauts) que está tan consciente de la peligrosidad de Matsumoto (21-1, 19 nocauts) que ha hecho uno de los mejores campamentos de su carrera.
“Siempre he entrenado a más no poder y después de obtener el campeonato esa parte no cambió. Mi concentración y empeño siguen siendo sólidos porque siento que tengo aún mucho por demostrar. Mi meta es ser el mejor Supergallo del mundo y sé que se me ha mencionado, pero no quiero que haya ninguna duda. Hoy ese es mi objetivo, ser el mejor”, dijo Román desde su campamento en Estados Unidos.
Contra Kubo, dijo Román que la clave fue establecer su boxeo desde el inicio y no dejar que la pelea llegara a las tarjetas, algo que planea hacer de nueva cuenta. “A Kubo pude boxearlo y controlarlo pese a que estaba igual de alto. El plan es hacer lo mismo, golpear a Matsumoto y no dejar que la pelea la puedan decidir los jueces”, destacó el californiano de 27 años.
Se dijo Danny consciente de la peligrosidad del japonés, que tiene 19 nocauts en 21 triunfos y sólo tiene una derrota, pero también señaló que hoy su concentración es mucho mejor que cuando era un aspirante más al título. “Me siento más enfocado porque sé que Matsumoto anhela mi campeonato, sé del hambre que tiene porque yo tenía esa hambre hace unos meses. Me siento confiado ahora porque sé que estoy preparado para lo mejor”, concluyó.
La cartelera del 28 de febrero será copromovida por Thompson Boxing y Ohashi Promotions, y el ganador de la pelea debería enfrentar al mexicano Moisés Flores, campeón interino de la Asociación Mundial de Boxeo, como parte de la política de reducción de títulos implementada por el presidente Gilberto Jesús Mendoza.