En la última conferencia de prensa, Machado se dijo ansioso por volver a pelear en el Madison por primera vez desde 2014 y darle a los fanáticos del boxeo una gran muestra de sus habilidades, mientras que Evans dijo estar dispuesto a hacer lo necesario para irse como campeón del mundo.
“Esta es mi segunda pelea en la meca del boxeo (Madison Square Garden), Miguel Cotto, quién es mi promotor, tuvo grandes peleas aquí y para mí es un placer continuar la historia”, dijo Machado (20-0, 16 nocauts). “No puedo esperar para defender mi título ante mi gente de Puerto Rico aquí en Nueva York, estoy listo”, añadió.
Freddie Roach, entrenador del campeón de la AMB, se dijo confiado en el triunfo. “Machado está mejor cada vez. Cada día que se acerca la pelea, lo siento pegando más y más fuerte, casi como un peso pesado. Espero Evans tenga talento o le va a pasar por encima un tren”, estableció.
Pero a Evans parece no importarle la pegada de Machado o las palabras de Freddie. “Vengo a derribar la montaña. Sé que es una montaña grande, pero estoy listo. La historia de mi vida ha sido venir desde abajo y este sábado voy a derrotar al campeón”, expresó el aspirante a campeón del mundo.