La llamada “Amazona Negra” mostró un estado técnico y físico admirable, dominó la pelea a base de experiencia y constancia. Conectó las mejores combinaciones y llevó la batuta en el ataque.
A pesar del dominio de la campeona, la australiana Dwyer fue una digna rival y sobrepasó las expectativas en su primer combate titular.
La retadora hizo trabajar al máximo a Hanna, que por momentos buscaba conectar una mano para acabar las acciones, pero su rival aguantó de todo y también atacaba esporádicamente.
Terminado el choque ambas púgiles se dieron un gran abrazo y agradecieron al pueblo nicaragüense por apoyar el boxeo, además de reconocer y respetar el trabajo de las mujeres en el tinglado.
Sobre su futuro cercano, Hanna Gabriels expresó que estaría interesada en una revancha contra la estadounidense Claressa Shields o un mega pleito ante la reina del boxeo Cecilia Braekhus de Noruega.