La pelea auguraba fuegos artificiales por el poder en los puños de ambos púgiles, y el desenlace no escapó de esa promesa. El primer asalto fue muy movido, Núñez buscando el cuerpo y Davis también tirando cañonazos para matar.
Llegó el segundo round de la noche, Davis encerró al panameño en las cuerdas y le conectó un volado de izquierda que le sacudió la cabeza, quedando en malas condiciones y dejando la puerta abierta para descargar más de su arsenal, obligando al árbitro Harvey Dock a detener las acciones en protección de la humanidad del canalero.
Para Davis, quien estuvo acompañado de su consejero Floyd Mayweather Jr., el nocaut fue la cereza del pastel para romper una sequía de décadas sin pleito titulares en su ciudad. Mientras que, Núñez, se fue con las manos vacías a Panamá, que sigue sin tener un campeón mundial desde el 2017.
Con este triunfo Davis dejó su récord invicto en 22 victorias y 21 nocauts. Por su parte, Núñez quedó con un palmarés de 21 ganadas, 19 nocauts y 3 derrotas.