Prensa/COV/Jabeando/Deportivas/02-08-2019.- A Ángel Pulgar los Juegos Panamericanos le traen buenos recuerdos. Su firma todavía está en el récord continental de la velocidad por equipos (un 43.188 que llegó a estar a milésimas de la plusmarca mundial), pero hoy su día estuvo muy lejos de aquellas tardes de gloria en el velódromo de Tlaquepaque, en Guadalajara 2011.
Ya Pulgar no pertenece al equipo de velocidad, que hoy no se presentó a su eliminatoria, pese a estar inscrito, para concentrarse en las posibilidades individuales de sus integrantes. Corrió su nueva prueba, el Ómnium, en la que es el actual campeón panamericano (coronado el año pasado en Aguascalientes, México), pero tuvo que conformarse con un sexto lugar.
“Yo tenía la esperanza de estar en el podio, pero así es el ciclismo, en estos momentos no me encuentro al 100% de mis condiciones, traté, pero no me alcanzó”, lamentó el ex campeón mundial juvenil de kilómetro contrarreloj y ganador de un diploma olímpico en Río 2016.
Para Pulgar la lucha no fue solo contra un lote de competidores que incluía al estelar colombiano Juan Esteban Arango (quien también quedó fuera del podio), sino contra un proceso infeccioso que lo tuvo hasta hace poco tomando antibióticos, y del que recién ahora comienza a recuperarse.
“El nivel aquí es duro, y de verdad no me recuperé a tiempo. En la prueba por puntos, particularmente, pude haber ganado dos esprints, pero eso significaba gastar toda mi fuerza y arriesgarme a no terminar la prueba, y eso hubiera sido peor. Traté de reservar la fuerza que tenía para poder terminar, y afortunadamente pude mejorar de un octavo lugar a un sexto”.
Pulgar fue octavo en Scractch, cuarto en tempo, undécimo en eliminación y finalmente sexto en la prueba por puntos. Fue el único participante del día y el primer doliente de que su amada velocidad no participara: “Siempre estoy pendiente aunque ya no la corra, soy fanático de esa prueba, después de tantos años en ella. Me genera muchos sentimientos ver que Venezuela no estuviera presente, me dolió mucho, porque se ve que no hay relevo: no puede ser que me voy del equipo y no haya quien la corra”.
La pausa del guerrero incluyó el reencuentro con sus tres hermanos, residenciados en Lima desde hace año y medio, pero el tiempo del reposo todavía no llega, pues Pulgar analiza participar también en la prueba de ruta.