Prensa/CFC/Jabeando/Deportivas/22-07-2020.- El miércoles 16 de septiembre a las 8:30 de la noche es el momento señalado por la Confederación Sudamericana de Fútbol para que el Caracas Fútbol Club vuelva a las canchas para reanudar su participación en la Conmebol Libertadores. Su rival será el Deportivo Independiente Medellín, en compromiso correspondiente a la tercera fecha de la fase de grupos del torneo internacional.
“Ya vemos una luz al final del camino y como jugador uno se emociona. Uno plasma un objetivo o una fecha más o menos estimada y la planificación es más precisa porque nos enfocamos más en algo. Se pueden planificar mejor las cosas personales y eso aligera la carga, porque son momentos en los que las emociones tienen picos muy altos o muy bajos en la sociedad y nosotros no estamos exentos de eso. El ya tener un panorama más claro y trabajar por lo que uno se apasiona hace que los entrenamientos tengan mayor calidad”, indicó Ricardo Andreutti, uno de los capitanes del Rojo.
Ésta quizás ha sido la pausa más larga por la cual ha pasado un jugador de fútbol, pero el haber cumplido a cabalidad las rutinas de entrenamiento que mandaba Javier Milán ha logrado que los jugadores no se resintiesen en el regreso a las canchas. “Obviamente uno se fatiga más las dos primeras semanas porque hay cosas que uno no puede hacer en la casa y pegan más en la cancha. Chita y Javi han llevado muy bien las cargas y poco a poco han ido aumentando y respondemos bastante bien”, resaltó el dueño del dorsal 15 del Caracas FC.
“Aparte del roce del balón con la cancha me faltaba mucho la convivencia con los compañeros. Esa sinergia que tenemos como grupo se extrañaba muchísimo. El confinamiento es un golpe para la humanidad entera y para uno como futbolista este tipo de espacio para compartir, más allá de que exista un cierto distanciamiento, hace que uno lleve las cosas de forma más ligera”, agregó el volante de primera línea.
Andreutti es uno de los jugadores con mayor experiencia en el club. Es por ello que sus palabras son una referencia para sus compañeros, así como también para su entorno. Está consciente que los protocolos que se llevan a cabo en Cocodrilos Sport Park deben mantenerse fuera del recinto, por el bien de ellos como grupo así como también por el de sus familiares.
“En lo particular ese aspecto es el que me da bastante temor (salir a la calle). Afortunadamente vivo solo, pero en los últimos días mi mamá se tuvo que quedar en casa por temas médicos y me da mucho temor ir a la calle, por más que en Cocodrilos todos nos sentimos protegidos. (…) Trato de tomar las mismas previsiones que tomamos con el equipo en el transcurrir del día y que la casa sea como un búnker en el que nadie pueda entrar por el bien de los familiares, porque quizás algunos estemos en una edad en la que no pega fuerte, probablemente asintomáticos, pero hay una carga de responsabilidad con la sociedad y el nivel de contagio y volatilidad es muy alto”, concluyó Ricardo Andreutti de 33 años de edad.