Por Jesús Cova
Prensa/Boxeo Plus/Jabeando/26-09-2020.- El pasado 23 de septiembre se cumplieron 93 años de la que ha sido catalogada por buena parte de los entendidos como la más controversial pelea de la historia del boxeo, en virtud de las particulares circunstancias que la envolvieron y que relataremos con especial dedicatoria a las nuevas generaciones de aficionados y, obvio, sin dejar a un lado a los de 50-40-30 de edad, quienes seguramente leyeron en su momento los pormenores de un combate que pasó a las páginas del recuerdo con el nombre del de “La Cuenta Larga” , protagonizado por los pesos pesados Jack Dempsey y Gene Tunney, distinguidos huéspedes del Salón Internacional de la Fama del Boxeo de Canastota en Nueva York.
Acaso los únicos otros combates que podrían semejarse en lo polémico con el GT-JD podría ser, salvo error u omisión, el mismo Dempsey por la faja ante el argentino Luis Ángel Firpo el 14/9/1923 en el Soldiers Field de Chicago o el de Julio César Chávez vs Meldrick Taylor en el hotel Hilton de Las Vegas el 17/3/1990 por la faja superligera CMB-FIB en la que el árbitro Richard Steele detuvo las acciones a solo dos segundos del final en favor del mítico púgil mexicano.
UNA CÁLIDA NOCHE DE VERANO…
Era una calurosa noche de verano de más de 20 ° grados centígrados aquella del 23 de septiembre de 1927. Más de cien mil espectadores, muchos de los cuales habían acudido solo por mera curiosidad pues poco o nada sabían de boxeo, se apiñaban con la adrenalina en el tope y la mirada fija en el cuadrilátero del Soldiers Field de Chicago, Illinois, sobre el cual Dempsey, el noveno campeón mundial pesado de la historia y uno de los de mayor popularidad en los anales del ring, intentaría recuperar el título de manos de Tunney, quien también en septiembre del ´año anterior había derribado los pronósticos con una victoria por decisión en el Sesquicentenario de Filadelfia (114/9) ante quien era considerado imbatible.
Igual a como pasó la primera vez Dempsey subió en rol de favorito de periodistas y aficionados, quienes suponían que el “Carnicero de Manassa” dispondría del hábil exmarine, héroe de la I Guerra Mundial, un voraz lector y amante de la música clásica, “ rara avis ”en el rudo universo de los golpes.
La pelea se desarrollaba en sus rondas iniciales sin mayores alternativas, aunque con leve ventaja para el monarca mientras el promotor Ted Rickard, se frotaba feliz las manos por el éxito en la venta de boletos que fue de un poco más de $ 2.5 millones, casi el doble de la primera recaudación.
LA CUENTA LARGA
Dempsey, nacido William Harrison Dempsey el 24 de julio de 1895 en Manassa, Colorado (falleció a los 87 años, el 31 de mayo de 1983 en Nueva York), llegó a la corona, con un KO en tres rounds sobre Jess Willard, a quien derribó 7 veces en el primero en julio del año ’19 en Toledo, Ohio. Lo expuso sucesivamente frente a Billy Miske (KO en 3 en febrero de 1920), Bill Brennan (KOT2, 20 de diciembre); el francés Georges Carpentier (KO4, 21 de julio); Tommy Gibbons (DU15, febrero-23); el argentino Luis Ángel Firpo, primer latinoamericano que peleó por la faja completa y, perdedor en septiembre ‘del 23, en el Madison de NY en una pelea de final discutido y, finalmente contra Jack Sharkey, a quien liquidó en 7 en La Gran Manzana en julio del ’27.
Tunney se interpuso en el camino-Dempsey ya se ocupaba más del cine y de los negocios que del gimnasio-para poner cese a una “dictadura” de siete años con una inobjetable victoria en 15 en disputa de la faja NBA (Ahora AMB) de por medio.
En los primeros seis asaltos del pleito de revancha nada especial había ocurrido: Dempsey atacaba como un toro de lidia en el ruedo mientras Tunney lo mantenía a raya con sus incesantes desplazamientos, mayormente defensivos,
Mediado el histórico 7 ° asalto el retador acorraló en las cuerdas al campeón y lo tiró de espaldas con una ruda derecha, antecedida de una no menos potente izquierda. Una regla vigente para esa pelea (norma aun vigente) obligaba al boxeador de pie ir a una esquina neutral para que el árbitro iniciase el conteo. Él “tercer hombre”, Dave Berry, ordenó a Dempsey dirigirse al rincón, pero éste, acaso por desconocimiento de la regla, no se movió y cuando al fin lo hizo Berry empezó la cuenta, que llevó hasta 9. Ya transcurrido entre 14 y 16 segundos.desde la caída del titular.
Luego de levantarse, tambaleante y lentamente, Tunney se las ingenió para cubrir las tres rondas restantes y para llevarse la decisión de los jueces George Litton, Sheldon Clark y el propio Berry.
Dempsey no volvió a montarse en un cuadrilátero y cuando se marchó acumulaba un registro de 54 (44 por KO), 6 (1.por KO) y 9 empates. Otras publicaciones le dan 61 ganadas (50 Kos.), 6 derrotas (1 por nocaut) y 8 tablas.
Por su parte Tunney (25 de mayo de 1897-7 de noviembre de 1978) noqueó en 11 rounds a Tom Heeney el 26 de junio del ´28 en su segunda defensa y luego colgó la trusa y los guantes, con marca de 65-1- 1 con 48 nocauts. La única mancha en su récord se produjo el 23 de mayo de 1922 frente al peso medio Harry Greb, “El Molino de Pittsburgh”, otro inmortal, en Nueva York.
(La pelea de “La Cuenta Larga” se ha hecho más larga las veces que ha sido recontada…).
Nota del Editor: El periodista deportivo Jesús Cova, quien es también oficial de la Asociación Mundial de Boxeo desde hace más de 20 años, fue profesor de Periodismo Informativo y de Opinión de la Escuela de Comunicación Social de la Universidad Central de Venezuela y actualmente colaborador como columnista del diario deportivo Líder. Está considerado como el maestro de la crónica deportiva de Venezuela.