Por Jesús Cova
Foto: Cortesía
Prensa/AMB/Jabeando/26-05-2021.- Los peleadores venezolanos Carlos (CCC) Cañizales y Jorge “El niño de oro” Linares tendrán acción este viernes y sábado respectivamente, con el primero en defensa del cinturón regular minimosca (48,990 kilogramos) de la Asociación Mundial de Boxeo, en la emblemática Arena México”, de Ciudad de México, el otro en un duro y crucial combate que podría marcar su despedida de los ensogados o acaso la reapertura de un camino de retorno hacia los primeros planos de la actividad, en el que buscará adueñarse de la corona del peso ligero (135 libras o 61,237 ks) Consejo Mundial de Boxeo.
Bien puede decirse que ambas peleas vienen a ser algo así como una moneda de dos caras, lo que explicaremos en las líneas que siguen.
LINARES EN UNA ENCRUCIJADA
Por razones de jerarquía, de notoriedad, aunque su compromiso va un día más tarde, necesariamente debemos ocuparnos en primer término de Linares, quien enfrentará este sábado al estadounidense Devin Haney imbatido rey liviano del Consejo, en el majestuoso Michelob Ultra Arena del Mandalay Bay & Casino al sur de Las Vegas, Nevada, con aforo para 12 mil personas.
Es obligada la referencia en primer lugar de Linares, reiteramos porque Jorge Linares tres veces campeón del mundo en pluma, superpluma y ligero, es un nombre todavía y ahora de mucho prestigio en el mundo de las 16 cuerdas. Hoy, ya con 35 años y con un récord de 47 victorias, 5 reveses por KO y 29 nocauts a su favor, el venezolano nacido en Barinas, un estado del occidente de Venezuela, es una figura familiar para la afición universal de la disciplina, en la que empezó a hacerse notar desde temprana edad, como animador que fue en un par de ediciones de las carteleras que animaban y proyectaban el programa “KO a las Drogas” creado por el extinto presidente de la AMB, Gilberto Mendoza senior.
De hecho, Linares contó siempre con el apoyo de quien es el Presidente Emérito de la Asociación Mundial de Boxeo, organismo que presidió entre 1982-2015, del que fue reemplazado en el cargo por su hijo, Gilberto Mendoza junior. Quien escribe recuerda que hará más de 20 años, en una Convención de la AMB realizada en Panamá, Linares fue una figura relevante en el programa del KO a las Drogas. En esa oportunidad GM confió al redactor que el muchachito de aquel entonces llegaría a ser una figura de primer nivel en el boxeo, como en efecto pasó unos años más tarde. Linares debutó en el campo profesional el 15-12-2002 y noqueó al surcoreano Kyon Soo Chung. Lo que marcó el punto de partida de una carrera brillante, culminada con la conquista de los cetros pluma, superpluma y ligero, tanto de la AMB como del CMB, tal quedó dicho.
Desde entonces. Ha llovido profusamente. En la actualidad, el venezolano y luego de un par de frustraciones ante Vasyl Lomachenko y Pablo César Cano (ambas perdidas por KO), pugna por retornar a los primeros planos, lo que intentará el sábado en su combate, para muchos decisivo en su futuro, contra un pegador de respeto y una estrella naciente en el firmamento de fistiana, con 22 años, trece menos que el aspirante CMB. En su más reciente, su segunda defensa el 7 de noviembre del año pasado, derrotó sin contratiempos al cubano Yuriorkis Gamboa excampeón de mundo de la categoría.
El venezolano está inactivo desde febrero del año pasado, ocasión en la que venció al mexico-estadounidense Carlos Morales en 9 tramos. La generalidad de los expertos asignan el favoritismo al campeón, un peleador agresivo, de recia pegada como lo muestra su palmarés. Esos mismos expertos estiman que un revés de Linares lo apartará finalmente de la profesión en la que está desde los quince años. o menos. Lo que es seguro es que Linares pondrá el corazón sobre el ring y que a Haney no le será sencillo desembarazarse de él.
CAÑIZALES CON VIENTO A FAVOR
En teoría, Cañizales irá a un compromiso aparentemente con ventaja a su favor. Se medirá al azteca Esteban Bermúdez Salas, un nombre nada sonoro. Para el caraqueño de 28 años, 6 de ellos en el campo profesional en el que suma un registro de 22 ganadas con 0 derrotas y 17 nocauts, la pelea será la tercera defensa del cinturón que conquistó el 18 de marzo de 2018 con un triunfo a los puntos sobre el peleador de casa Reiya Kunioshi en Kobe, Japón, y la expuso con éxito contra Bin Lu, por KOT12, en Kuala Lumpur, Malasia, el 15 de julio de 2018 y luego frente a Sho Kimura por DU el 26 de mayo de 2019 en Fuzhou, República Popular China, su última actuación hace ya más de 730 días. En su primer intento por un título en diciembre de hace ya casi cinco años, Triple C (Carlos Cañizales Civira) empató con Riochi Tagushi, en Ota, Japón.
El retador mexicano Esteban Bermúdez Salas presenta un récord de 13 triunfos con 3 derrotas, una por KO y una tablas con 9 ganadas antes del límite. Para los entendidos el venezolano es favorito amplio y se cree que debe imponerse por uno de los dos caminos posibles, aunque EBS contará con un respaldo mayoritario de los espectadores en el antiguo local que tiene capacidad para unas 37 mil personas (Se supone que no se llenará) y que es llamado “La Catedral de la Lucha Libre”.