Prensa/CMB/Jabeando/11–08-2022.- El excampeón mundial nicaragüense, Román “Chocolatito” González, nació en Managua el 17 de junio de 1987. Creció en un humilde hogar con sus padres y hermanos, donde la situación económica en ocasiones se tornaba complicada.
Desde pequeño Román fue apodado “Chocolatito”, ya que, a su padre, quien era comerciante, lo conocían como el “Chocolate”.
El amor de Román por el boxeo lo lleva en las venas, pues proviene de una familia de pugilistas. Creció viendo pelear y entrenar a su tío y a su padre, por lo que decidió dedicarse también a este deporte.
Desde muy joven mostró buenas facultades y gran disciplina en los entrenamientos, hecho que lo llevó a conocer a la leyenda nicaragüense, Alexis Arguello. Román comenzó a entrenar con un grupo de jóvenes bajo el mando del excampeón, lo que forjó su carácter y técnica depurada, que lo llevaron a coronarse como campeón mundial. Además, aprendió la disciplina, algo que aplica en su vida diaria y que lo ha llevado por un camino alejado de cualquier vicio.
En 2008 ganó su primera corona mundial, iniciando un camino de éxito que lo llevó a ser campeón en 4 divisiones diferentes. Derrotó a rivales de calidad como Francisco “Chihuas” Rodríguez, Ronald Barrera, Juan Francisco “Gallo” Estrada, Ramón García Hirales, Edgar Sosa, entre otros.
Uno de los momentos que más marcaron su carrera, fue cuando ganó el título mosca del Consejo Mundial de Boxeo, noqueando a domicilio al japonés Akira Yaegashi. Después de realizar 4 defensas exitosas, subió a la división supermosca para derrotar al campeón mexicano Carlos Cuadras, en una de las mejores peleas de 2016.
El “Chocolatito” es reconocido por ser un peleador valiente que enfrenta a los mejores de cada división en la que ha sido campeón. Independientemente de la huella que Román ha plasmado en el boxeo, es conocido por ser una persona llena de humildad y sencillez, cuyas mayores inspiraciones son su Familia, Dios y su patria.
Este jueves, el Consejo Mundial de Boxeo reconoció a “Chocolatito” por ser un ejemplo de constancia y superación personal, con un brazalete del CMB y un certificado de excelencia por todos sus logros dentro y fuera del ring.
“Me gusta mucho estar en México. Les agradezco la hospitalidad siempre. Mi familia es el CMB y me siento orgulloso. El mundo de boxeo no es fácil, pero hemos podido salir adelante gracias a mi amigo Carlos Blandón, al señor Honda y a todo el gran equipo de Teiken. Agradezco infinitamente a Dios por permitirme estar aquí y al señor Mauricio Sulaimán por este reconocimiento que me otorga hoy”, comentó Román.
“Considero a Mauricio Sulaimán como parte de mi familia, porque siempre está en la esquina de los boxeadores y eso es algo que agradecemos todos”.