Prensa/CMB/Jabeando/20–10-2022.- Mark “Magnífico” Magsayo perdió su primera pelea y el título de peso pluma del CMB en julio contra Rey Vargas, y está buscando sonrientemente corregir errores, entrenar más duro y volver a ser un campeón.
En una soleada conversación con Pepe Sulaiman, Mark destacó: “Rey Vargas es un gran peleador, perdí, pero aprendí mucho y tengo que volver más fuerte. Mark y el miembro del Salón de la Fama Freddie Roach se separaron en buenos términos y Mark le agradeció diciendo que fue un honor y una gran experiencia entrenar con Freddie”. El nuevo entrenador de Mark es su compatriota filipino Marvin Somodio, del Brickhouse Boxing Club. Ellos ya estamos trabajando duro, para la devolución del anillo de Mark.
Mark dice que el boxeo involucra la mentalidad de disciplina más dedicación. En cuanto al control de peso, cuenta con un nutricionista. Incluso si tiene tres libras por encima de la categoría de peso en la báscula, este estricto error de cálculo es difícil de superar. Entonces, llegar al peso adecuado es esencial, y luego Mark dice que se rehidratará entre doce y quince libras.
Mark explica que el boxeo no es fácil, por lo que debes entrenar de manera inteligente y fuerte. Él dice: “Puedo adaptarme a cada pelea. ¡Es por eso por lo que un peleador es un mutante!”
La perseverancia es la marca, el sello y la característica de un campeón. Mark conoció el boxeo cuando tenía siete años, cuando vendía helados. Pero su comienzo fue desfavorable. Perdió sus primeras tres peleas amateur. Sin desanimarse y sin inmutarse, se negó a darse por vencido o ceder. Luego ganó una revancha y comenzó a ganar, ganar, y ganar. Sus héroes son: Vinny Paz, Ricardo “Finito” López, Juan Manuel Márquez e Israel “Magnifico” Vázquez. Su ambición es pelear contra Leo Santa Cruz.
Para Mark, es solo el final del final del principio. ¡También dice que el cinturón verde y dorado es el mejor de todos y que necesita ganar otro!
Juzga por ti mismo. Esta es una conversación genial, bien equilibrada y bien enfocada, con un joven que está preparado para sonreír y soportarlo, para convertirse en un campeón mundial una vez más.