Hace 50 años en África / Muhamad Ali noqueó a George Foreman y recuperó Corona de Los Pesos Pesados

Por Simón Piña

Prensa/Jabeando/30-10-2024.- Utilizando una táctica increíble y sorpresiva Muhammad Ali, noqueó en el 8vo asalto al casi infalible ponchador George Foreman, y recuperó el título mundial de los Pesos Completos. Contrario a lo que había dicho y a lo que se esperaba, Ali no se desplazó para evitar los puños de “Big George” sino que, se cubrió el rostro con sus guantes, se recostó de las cuerdas y allí esperó el ataque del campeón. Los millones parciales de Muhammad se quedaron pasmado y presas del terror porque Ali estaba quedando expuesto al enorme poder de Foreman y, se creía, que por ese camino el “bocaza” de Louisville difícilmente llegaría de pie al final de la pelea; es más, daba la impresión de que no llegaría más allá del 3er asalto.

Pero increíblemente, Ali aguantó estoicamente los bombazos de su rival y, por el contrario, al ver que su pegada no hacía efecto en el atrevido retador, Foreman se fue desesperando y agotando por el esfuerzo de lanzar tantos puños. Al llegar al 6to asalto, la pelea había sido casi un monologo: Foreman atacando y Ali aguantando, pero de allí en adelante fueron surgiendo algunos contraataques de parte de Muhammad; las respuestas de Ali fueron aumentando para el 7mo y 8vo asalto, al tiempo que Foreman lucía muy agotado. En el round 8, Ali logró conectar una combinación de golpes que pareció lastimar a Foreman; seguidamente Muhammad atinó un potente derechazo al rostro del campeón que lo hizo caer de cabeza por el enlonado.

El réferi Zachary Clayton le aplicó el conteo al caído y aunque Foreman se levantó a la cuenta de 9, estaba tan exhausto que el árbitro lo decretó nocaut. El público, en su mayoría a favor de Ali, rugía emocionado y entonaban canticos en lengua africana, elogiando al sorpresivo vencedor, Ali se convirtió en apenas el segundo campeón de Peso Completos que recuperaba la corona; el único hasta el momento era Floyd Patterson, quien lo había logrado el 20 de junio de 1960, noqueando en 5 rounds al sueco Ingemar Johansson, en el desaparecido Polo Grounds de Nueva York. Johansson había noqueado a Patterson el 26 de junio de 1959 derribándolo hasta 7 veces en el 3er asalto en una pelea celebrada en el Yankee Stadium de Nueva York.

Todo el mundo pugilístico celebró la hazaña de Ali, quien tuvo la osadía de incluir en su comitiva tanto a su esposa Khalilah Boyd como su amante Verónica Porsche. Este riesgo es solo comparable con las aventuras de héroes como: Indiana Jones o Rambo, otro detalle interesante es que el inquieto Ali se divorció de su esposa para casarse con Verónica Porsche, quien el año 1977 trajo al mundo a Layla Ali, futura campeona mundial de boxeo.

De allí en adelante Ali recorrió al mundo defendiendo su corona hasta perderla frente a León Spinks, el 15 de febrero de 1978, en el Hilton de Las Vegas, pero insistió y la recuperó venciendo al propio Spinks el 15 de septiembre del mismo 1978 por decisión en el Superdome de New Orleans. Después de eso se retiró, pero volvió el 2 de octubre de 1980, para perder tristemente con Larry Holmes por abandono en el 10mo en Las Vegas.

Todavía hizo un último intento el 11 de diciembre de 1981, en Nassau Bahamas, perdiendo por decisión ante el haitiano canadiense Trevor Berbick. Ali no volvió a pelear, pero siguió activo en la vida pública pese a que le atacó el Mal de Parkinson, enfermedad que lo llevó a la tumba el 3 de junio de 2016. Ali deja un gran legado y su imagen encendiendo el Pebetero, con manos temblorosas en Las Olimpiadas Atlanta 86 es imborrable. Hoy recordamos aquella hazaña de Muhammad Ali de la cual se cumple 50 años.