Por Simón Piña
El siempre polémico Floyd Mayweather regresó a los cuadriláteros en un, no muy convencional, combate ante el artemarcialista irlandés Connor McGregor, al que venció por Kot luego de 10 asaltos. El combate se llevó a cabo en el T Mobile Arena de Las Vegas con un entusiasta público que apoyó a uno y a otro casi por igual. Una parte importante de los asientos del gran local fue ocupada por delirantes aficionados irlandeses vestidos de verde procedentes de Nueva York y Boston, ciudades que albergan la mayor cantidad de ciudadanos de esa nacionalidad.
El combate estuvo rodeado, además de gran promoción, de una lluvia de críticas que fluían desde distintos ángulos. Unos decían que esto era un simple Show preparado para que Floyd ganara la pelea sin golpear mucho a Connor y que ambos se ganaran unos buenos millones sin salir muy golpeados del ring. Otro argumento era que debían pelear en igualdad de condiciones, es decir, que Floyd utilizara sus argumentos boxísticos y que McGregor empleara sus conocimientos de las distintas artes que domina. Para algunos otros, era injusto que se peleara sólo en boxeo, ya que McGregor era un debutante contra un hombre demasiado experimentado como Floyd. Muchas voces denunciaban que este tipo de espectáculo dañaba la imagen del boxeo.
En medio de este ambiente, pero con mucha expectativa, sonó la campana en el T Mobile Arena de Las Vegas. En las primeras de cambio, con los contendores (sobre todo Connor) en plenitud de condiciones, el irlandés parecía mucho más alto y fuerte. Atacaba con decisión y velocidad, mientras Floyd esperaba a ver que traía su rival. En esas, pasó un 1er round que los jueces vieron a favor de McGregor. Desde el segundo al 5to asalto, la tónica fue parecida, si bien, Floyd pegó algunos golpes en el 2do que, aparentemente le dieron el asalto en la puntuación. El irlandés, en esos comienzos trataba de sorprender a Floyd con rápidas, aunque no muy potentes, combinaciones.
En ocasiones, Floyd se vio sorprendido, como por ejemplo, en el 1er asalto cuando recibió un golpe ascendente en plena barbilla que le levantó la cara. En los comienzos de estos rounds, más o menos, hasta el 6to, Mc Gregor salía ganoso y llevaba contra las cuerdas a Floyd y lo atacaba con combinaciones e incluso le pegaba golpes a la nuca. Pero ni Floyd se quejaba ni el referee Robert Byrd parecía interesado en corregirlo. Hasta aquí el irlandés había competido con gallardía, pero el cansancio empezaba a afectarlo. Floyd se había reservado en esos primeros asaltos, estudiando al rival y, es justo decirlo, un poco dejando que fluyeran las acciones y Connor se anotara algunos puntos.
De la mitad de la pelea en adelante, una combinación de cansancio de McGregor y calentamiento con presión, por parte de Floyd, empezaron a definir la pelea. McGregor atacaba cada vez menos y Floyd presionaba cada vez más. Ascenso de uno y descenso del otro iban sucediéndose gradualmente. Para el noveno round, la cosa estaba tocando los extremos. La campana salvó milagrosamente a McGregor que daba tumbos por el ring, zarandeado por los golpes de Floyd que arreciaba cada vez más, su ataque. Al salir al 10mo round, la cosa llegó a nivel crítico. Mayweather adelantaba un ataque desatado y Connors ya no se sostenía en pie. Golpes van y golpes vienen. Connor saltaba por el ring a trompicones y de milagro se sostenia. En una de esas que McGregor estaba contra las cuerdas y ya se iba a la lona, el árbitro Robert Byrd se interpuso y detuvo el combate.
Según cifras extraoficiales, sólo en Pay Per View la pelea produjo unos 6, 5 millones, elevando a unos 650 millones de $$$ los números de ganancias televisivas. Floyd debió embolsillarse unos 350 millones de $$$ mientras que el bueno de Connor ganaría unos 100 millones. Estas cifras constituyen por mucho, un record en los anales del boxeo. La anterior pelea-record era la de Mayweather y Pacquiao, que arrojó millones, pero muchos menos que esta.
Otro detalle interesante de esta pelea es que despertó el interés de un público que va mucho más allá del ámbito del boxeo. Es así como hicieron acto de presencia en el T Mobile Arena de Las Vegas, figuras de otros deportes y del mundo del Cine y la Música., como por ejemplo, Angelina Jolie, Drake, Diddy, Mark Whalhberg, Denzel Washington, Charlize Theron, LL Cool J, Jamie Foxx, Rick Rose, Adam Levine, Michael Bay, Avicii y Demi Lovato quien interpretó el Himno.de los Estados Unidos. Igualmente se vio en los primeros asientos a la estrella del Baloncesto Lebron James y al no menos famoso ex campeón Pesado Mike Tyson. Fue un acto donde, desde distintos aspectos, se expandió el radio de influencia, tanto de la UFC como del boxeo.