El día que Ramoncito derrotó al pupilo de Rocky

Video: Cortesía Youtube

Por: José Cuevas
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Prensa/Jabeando/08-09-2020.- El pasado 31 de agosto se cumplió el aniversario un nuevo aniversario (51 años) de la desaparición física, en un accidente aéreo, de uno de los mejores pesos completos de la historia del boxeo: Rocky Marciano.

Pero además de reconocer su brillante carrera, invicto en 49 peleas, 43 por nocaut, destacaba en Marciano una gran fortaleza física para un heavyweight, pese que en su infancia estuvo a punto de morir de pulmonía, con una estatura de 1 metro 73 centímetro, acabó con rivales como Jersey Joe Walcot, Joe Louis (Ya en decadencia), Ezzard Charles y Archie Moore.

Pero hoy vamos a recordar algunos datos y anécdotas que los vinculan con Venezuela. Recordamos que visitó al país como entrenador, ya retirado como campeón invicto en 1956. Rocky estuvo en la ciudad de Maracaibo, estado Zulia, para mediados de mes de mayo de 1962 cuando su pupilo Ronnie Da Costa enfrentó al ídolo nacional Ramoncito Arias.

Bueno, el peso mosca zuliano Arias, quien fue el primer venezolano en disputar títulos mundiales (Mosca, el 19 de abril de 1958 y gallo en el 19 de agosto de 1961) y aunque había sido derrotado ante los fenómenos Pascual Pérez (19 de abril de 1958, en mosca) y Edder Jofre (19 de agosto de 1961), intentaba retomar la senda de la victoria. Y así lo hizo al imponerse por decisión clara en 10 asaltos al protegido del gran Rocky Marciano.

Como dijimos, Rocky se retiró invicto en el boxeo profesional-tan solo perdió una sola pelea y fue en amateur ante Coley Wallace, en 1948- pero lo interesante que en ese reducido nicho de campeones que se retiraron invictos lo comparte entre otros con Floyd Mayweather Jr y el venezolano, también desaparecido trágicamente: Edwin “Inca” Valero.

Otro dato curioso en la carrera boxística del italo norteamericano Rocky Marciano es que debutó en el profesional en 1947 ganando por nocaut en tres rounds Lee Epperson, pero luego regresó al campo aficionado para intervenir en un torneo de Guantes de Oro de 1948, experiencia en la resultó derrotado ante el mencionado Wallace.

Rocky retornó al boxeo de paga e hizo una de las carreras más brillantes del boxeo, especialmente en la historia del peso completo. Para la posteridad quedó aquel combate en que captura la faja ante Walcot (2 de septiembre de 1952) en round trece. El derechazo que pegó Rocky convirtió el rostro de su rival en una máscara espantosa, desfigurada. La instantánea de aquel mandarriazo sobre el mentón de Walcot fue la foto del año en el deporte.

Antes de su incursión en serio en el boxeo Rocco Francis Marchegianofue fue un destacado luchador en su etapa de escolar, así como un excelente jugador de Footbol Americano, pero donde se le auguraba el mayor porvenir era como pelotero.

Tanto es así, que Marciano estuvo a punto de ser firmado por los Cachorros de Chicago en el cual jugaría la posición de receptor. Será por eso que luego en el boxeo por su estilo de asimilador consistente, gran pegador, me atrevería definirlo como un púgil que subía con careta y peto de cátcher… y además golpeaba a sus rivales con un bate.

Después de su retiro, Rocky Marciano hizo presentaciones como comentaristas de boxeo en TV, así como de actor. Aquí en Venezuela lo vimos -se me cayó la cédula- en una serie de televisiva llamada Combate, junto a la estrella del programa Vic Morrow.

A pocos meses de su fallecimiento, un día antes de su cumpleaños número 46 (Nació un 01 de septiembre de 1923, en Brockton, Massachusetts, Estados Unidos, hijo de inmigrantes italianos: Pierino y Pasqualena Marchegiano), filmó junto al lejendario Muhammad Ali una sesión de guanteo, la cual fue proyectada en el año 1970 en una imaginaria pelea entre Rocky versus Ali. Los productores del programa alimentaron una computadora con los datos boxísticos de ambos gladiadores, arrojando como resultado una victoria por nocaut para Marciano en el asalto número 13.

Al ser consultado sobre el resultado del match virtual, Alí, siempre tan modesto afirmó: “Yo hubiese noqueado a Rocky y a la computadora también”.

Bueno amigo, hasta aquí el conversatorio de hoy. Espero les haya entretenido esta remembranza de Rocky Marciano, en la cual resaltamos aspectos no tan conocidos de este exponente del peso máximo. Será hasta el próximo conversatorio, el cual cada semana nos invita a sostener con ustedes la Confederación Internacional de Boxeo (CIB)

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