27 de febrero de 1971 en el Nuevo Circo de Caracas 
Vicente Paúl Rondón noqueó a Jimmy Dupree y consiguió segundo título para Venezuela
Por Simón Piña
“Parece que se va………..parece que se va……..” exclamaba el inolvidable narrador cubano Gonzalo López Silvero en la transmisión televisiva, mientras Vicente Paúl Rondón, zarandeaba contra las cuerdas, el cuerpo sangrante del norteamericano Jimmy Dupree. El famoso referee Zachary Clayton se apiadó del púgil estadounidense y le abrazó para impedir que cayera a la lona. Gran celebración en el Nuevo Circo de Caracas y en todo el país. Rondón se convertía en el segundo Campeón Mundial de Boxeo, después del “Morocho” Hernández, en la historia del pugilismo venezolano.
También, Rondón, fue el segundo Latinoamericano en conseguir la corona de los Semicompletos, después del boricua José Luis “Chegüi” Torres quien, unos ocho años atrás, había noqueado al norteamericano Willie Pastrana para convertirse en el 1er latino en alcanzar esa corona. Pero no todo fue felicidad antes y durante la pelea. López Silvero nos contaba que esa pelea se iba a celebrar en Puerto Rico, donde Rondón hizo fructífera campaña varios años. Previamente, la AMB había desconocido al anterior campeón, Bob Foster, por no defender su corona ante el propio Jimmy Dupree.
Otro cubano, Tuto Zavala, era el apoderado de Rondón y gestionaba la clasificación del venezolano para que participara en una eliminatoria en busca del sucesor de Foster. Dupree era el primer retador y Rondón alcanzó el segundo puesto luego de derrotar al clasificado norteamericano Roger Rouge. Zavala y López Silvero hablaron con sus paisanos, ejecutivos del canal venezolano Venevisión (especialmente Enrique Cuzcó) y les pareció buena idea celebrar la pelea en Venezuela, tierra de Rondón, y transmitirla por el respectivo canal televisivo.
Así, la eliminatoria por el título Semicompleto AMB, se pautó para el 27 de febrero de 1971 en el legendario Nuevo Circo de Caracas. Fueron muchas las gestiones que hubo que completar para llevar a cabo la empresa, pero –nos decía López Silvero-, al final, todo se logró como ellos querían. Aquel sábado, Venevisión también transmitía el famoso Festival de San Remo, que salió al aire antes de la pelea. Esperando el gran combate vimos como Nicola Di Bari y la cantante italiana Nada Malamina, ganaban el Festival (el más prestigioso del mundo en aquellos tiempos) con la cancíón “Il cuore e uno Zingaro” (El Corazón es un gitano). Di Bari, antes de ser un famoso cantante, trabajó como Barbero, en el centro de Caracas.
Luego de aquel aperitivo musical, pasamos al Nuevo Circo donde reinaba un nerviosismo silencioso pero persistente y torturador. Todos nos preguntábamos: ¿Podrá Rondón? Sólo contábamos con un Campeón Mundial, el “Morocho” Hernández, quien había perdido su corona Welter Jr a manos del italiano Sandro Lopopolo en el Coliseo de Roma, el 29 de abril de 1966 y desde entonces, habíamos fallado en dos intentos. El primero, cuando Vicente Rivas, se quedó en la esquina antes del 8vo round por una lesión en un hombro en su pelea con el propio Sandro Lopopolo en Roma.
Unos años después, el 9 de febrero del 69, el ídolo cumanés, Pedro Gómez, optó por la corona Pluma AMB, cuando ya sus facultades habían mermado, ante el joven japonés Shozo Saijo en Tokio. Saijo ganó por decisión unánime. En esta nueva oportunidad, había la ilusión de conseguir la gloria. Pero el 1er asalto del combate, por poco nos mata esa ilusión. Rondón salió a pelear sumamente nervioso y se desplazaba de forma irregular, con las piernas vacilantes.
Dupree, por el contrario, era un hombre de ataque tempranero. Sus mejores asaltos siempre eran los primeros, cuando atacaba con fuerza y lograba la mayoría de los Nocauts. Entre una cosa y otra, las acciones nos produjeron una angustia mayúscula porque parecía que Rondón se quedaba en los primeros minutos de la pelea. Dupree desplegó un ataque de un gran peligro para el venezolano quien pasó apuros en ese primer asalto.
Más angustia
Todavía fue peor, el segundo. Recibió un Uper, bárbaro,que le dobló las piernas y le hizo saltar el protector de boca. Terror en el Nuevo Circo. Rondón recibió par de puños más que lo hicieron poner rodilla en tierra. Mareado y tambaleante, recibió el conteo del referee Zachary Clayton. Dupree se le fue encima y el barloventeño se recostó de las cuerdas a soportar todo lo que le lanzaba el norteamericano. El sonido de la campana fue como música de Ángeles para los oídos de los asistentes al Nuevo Circo. Rondón se salvó de milagro.
Al salir para el tercer round los hombres ya habían entrado en calor. Rondón había recibido castigo pero lo había aguantado. Dupree lanzó su mejor artillería y no había logrado el Ko. La pelea comenzó a cambiar. Rondón utilizaba su Jab de izquierda y lastimaba el rostro de Dupree que exhibía cicatrices delatoras de la rudeza de otras guerras del pasado. Rondón tomaba su ritmo y Dupree comenzaba a sangrar ligeramente.
En el cuarto y quinto round, el dominio de Rondón se acentuó y tanto en los presentes en el Nuevo Circo como en los televidentes, crecía la esperanza de un triunfo del moreno de Barlovento. El recordado “Musiu” Lacavalerie, narró en la transmisión televisiva, los primeros cinco round. López Silvero, entró en el sexto. El narrador cubano vino, por primera vez a Venezuela, por pocos días, pero se quedó más de 20 años. En ese round, ya Rondón dominaba a placer mientras que Dupree estaba agotado y con el rostro cortado en varias partes.
Por fin, el gran triunfo
Una combinación de golpes en el centro del ring, hizo que Dupree se fuera tambaleante contra las cuerdas. Allá lo siguió Rondón y lo acribilló con izquierdas y derechas. El referee Zachary Clayton, considerado en aquel entonces, el mejor del mundo, se interpuso entre los peleadores y abrazó a Dupree, llenándose la camisa de la sangre del peleador. Había ganado Rondón. Increíble. Después de todo lo que sufrió los primeros minutos, la gloria le llegó en premio a su valentía. 
Fue el primero de cuatro títulos mundiales que el boxeo venezolano capturó ese año 71. Rondón defendió su título, ese mismo año, en cuatro oportunidades. Esos triunfos le valieron la designación de “Atleta del Año” por el Círculo de Periodistas Deportivos de Venezuela. El 27 de febrero de 2016 se cumplen 35 años de aquella hazaña de Vicente Paúl Rondón.