Por José Camejo Suárez
Foto: Cortesía
Prensa/Jabeando/01-06-2024.- En un hecho sin precedentes en más de un siglo, Argentina no tendrá representantes en el boxeo de los Juegos Olímpicos de París 2024. Esta ausencia marca un hito negativo en la historia del deporte nacional, generando preocupación y debate sobre el estado actual del boxeo argentino.
La eliminación de los últimos pugilistas argentinos en el Preolímpico de Bangkok confirmó lo que muchos temían: por primera vez desde 1924, ningún boxeador argentino subirá a un ring olímpico. Esta situación contrasta con la rica tradición pugilística del país, que ha cosechado 24 medallas olímpicas a lo largo de su historia, incluyendo siete de oro.
Las razones detrás de esta debacle son múltiples y complejas. Expertos señalan la falta de apoyo económico, la escasez de boxeadores de alto nivel, la falta de renovación generacional y la ausencia de una estructura sólida de desarrollo como factores determinantes.
La Federación Argentina de Boxeo (FAB) enfrenta críticas por su gestión y se le acusa de no haber implementado políticas efectivas para fomentar el deporte a nivel amateur. La falta de recursos económicos también ha dificultado la preparación adecuada de los boxeadores, limitando su participación en competencias internacionales y su acceso a entrenamientos de calidad.
Esta ausencia en París 2024 representa un duro golpe para el boxeo argentino y plantea interrogantes sobre el futuro de este deporte en el país. Es urgente tomar medidas para revertir esta situación y recuperar el prestigio perdido.
Es necesario invertir en el desarrollo de nuevos talentos, mejorar la infraestructura de entrenamiento, brindar apoyo económico a los boxeadores y fortalecer la gestión de la FAB. Solo así se podrá garantizar un futuro prometedor para el boxeo argentino y asegurar su regreso a los primeros planos internacionales.
La ausencia en París 2024 debe servir como un llamado de atención para todos los actores involucrados en el boxeo argentino. Es momento de trabajar juntos para reconstruir este deporte y devolverle la gloria que alguna vez tuvo.