*** El veterano patrullero aseguró que, si bien las cosas no han salido como esperaba Delfines hasta ahora, el actual subcampeón de la LMBP tiene lo «esencial» para reaccionar
Por Andrés Espinoza Anchieta
Foto: Kevin Hernández | Prensa Delfines
La Guaira/Prensa/LMBP/Jabeando/Deportivas/20-06-2024.- En una carrera de casi dos décadas como pelotero profesional, Gorkys Hernández lo ha visto prácticamente todo y ha estado en cualquier escenario posible. Desde saborear las mieles de un título, hasta la decepción de acariciar la gloria solo para quedarse a un paso. Asimismo, el patrullero no es ajeno a la sensación amarga de estar en el sótano de una tabla de posiciones, como ocurre en la actualidad con Delfines de La Guaira.
Los litoralenses llegaron a la presente temporada de la Liga Mayor de Béisbol Profesional como uno de los serios aspirantes al cetro, en especial después de alcanzar la final en la contienda anterior, en la que sucumbieron contra Marineros de Carabobo.
Sin embargo, las cosas no han salido ni cerca como esperaba la directiva, los jugadores y aficionados del combinado hasta los momentos. Delfines llegó a la jornada de este miércoles en el último puesto de la clasificación, con récord de 10-16, a cinco juegos y medio de la punta y con derrotas en sus últimos dos cotejos.
«El equipo se ha visto bastante bien, aunque no estamos en el lugar que queremos«, admitió Hernández en declaraciones para el portal oficial de la LMBP. «Esto es béisbol, nos estamos enfrentando a equipos que van a dar el 100% también. Todo el mundo quiere ver a Delfines en el primer lugar, pero los demás se armaron como tenían que hacerlo para ganar. Se vienen juegos que van a demostrar en dónde vamos a estar, si aquí o más arriba, pero tenemos lo esencial para estar dentro de la clasificación«, añadió.
El nativo de Guiria, de 36 años de edad, ha tenido un sólido desempeño en general en 2024, tal como lo evidencia su línea ofensiva de .333/.484/.469, con 10 dobles, un cuadrangular, 11 carreras remolcadas y 29 anotadas tras sus primeros 96 turnos del certamen.
No obstante, como es habitual durante una temporada en cualquier circuito, el «Cazador» ha pasado por momentos de poco brillo, lo que llevó a que el mánager Jackson Melián lo removiera del puesto de primer bate que Herández había asumido desde la zafra anterior.
«No sé si me siento cómodo allí o no, donde me pongan voy a hacer el trabajo. Me dieron ese rol al principio en la temporada pasada y pude hacerlo bien todo el año«, recordó. «Se hizo lo mismo este año, pero pasé por un mal momento en el bateo, como a todo el mundo le pasa, y ahora le dieron la oportunidad a Yefri Pérez y yo estoy de segundo. Todo depende de lo que Jackson quiera. El otro día estuve de octavo, intentando salir de la rutina, de buscar el pitcheo adecuado para estar en base, que es lo que siempre intento«.
Una de las apuestas de Delfines para buscar la remontada en esta segunda parte del campeonato será el rodaje de algunas de sus principales figuras, como Hernández. Junto a él, también destacan Wilson Ramos, Jesús Guzmán y Carlos Rivero, entre otros.
Pero el guardabosques está muy al tanto de que para salir de momentos así, no solo se requiere de la ayuda de un grupo, sino de toda la plantilla. Es por eso que la colaboración de los juveniles del conjunto también promete jugar un papel fundamental en el renacer guaireño.
«Uno sabe, como pelotero de experiencia, lo que tiene que hacer y nos enfocamos en ayudar a los jóvenes, porque en algún momento nosotros vamos a salir del béisbol y ellos tienen que tomar la batuta. No tienen que seguir nuestros pasos, sino mejores. Nuestros juveniles siempre han hecho un buen trabajo, nos escuchan, hacen lo suyo«, señaló el paleador. «Una de las cosas importantes que tuve yo cuando fui novato en la liga invernal fue eso, escuchar de peloteros que tenían una gran trayectoria, que empujaron mi carrera para ser quien soy hoy en día. Es el impulso para que puedan buscar sus caminos, incluso en otras ligas, porque todavía están jóvenes como para conseguir algo en Estados Unidos«, agregó.
De cualquier forma, más allá del desempeño de Delfines, Hernández simplemente sonríe en una etapa de su vida en la que, quizás los estadios de Grandes Ligas en los que jugó durante seis años ya no estén presentes, pero la felicidad que llega con uniformarse en Venezuela, en invierno y verano, llena cualquier vacío.
«Para mí es una experiencia muy grata, estar en mi país, en esta liga que todos los años va creciendo. Tenemos jugadores de mucha experiencia que han jugado en otro béisbol. Es un honor siempre estar en mi país y en especial con Delfines. Creo que el equipo va a dar mucho de qué hablar en lo que resta del torneo«, sentenció.